La familia es el mejor y más efectivo entorno de aprendizaje para los niños. Está demostrado que los hijos adoptan fácilmente los hábitos que se fomentan en casa así que, enseñarles a seguir y valorar costumbres que cuidan nuestra salud y bienestar, desde pequeños, va a tener efectos positivos de por vida y puede prevenir que en un futuro desarrollen factores de riesgo que pueden derivar en enfermedades, como las cardiovasculares, obesidad, colesterol, sedentarismo, etc.
Para el disfrute de una vida sana, tanto física como mental y social, los hábitos que debemos inculcar en la familia son:
1. Llevar una alimentación equilibrada:
La alimentación es la base para una buena salud en general. Una dieta saludable y variada, rica en frutas y verduras, es fundamental para obtener los nutrientes que necesita nuestro organismo.
2. Practicar ejercicio de forma habitual:
Practicar actividad física de forma habitual es bueno para su desarrollo físico y mental.
3. Beber agua:
Mantener una buena hidratación es fundamental para la salud. Beber agua o zumos es mucho más sano que abusar de bebidas carbonatadas o con altos contenidos de azúcar, que pueden afectar negativamente a nuestra salud.
4. Descansar correctamente:
Dormir las horas necesarias, tanto niños como mayores, es imprescindible para la recuperación del desgaste diario y el buen funcionamiento físico e intelectual de toda la familia.
5. Mantener una buena higiene:
Muchas de las enfermedades comunes podrían evitarse tan sólo con prestar un poco más de atención a la higiene. Lavarse las manos al llegar a casa, antes de comer y después de ir al baño, llevar una correcta limpieza bucodental, lavar los alimentos antes de consumirlos.
6. Alejarse de hábitos nocivos como el tabaco y el alcohol:
Desde pequeños en casa, es beneficioso que en la familia se fomente una actitud de rechazo a costumbres que pueden derivar en factores de riesgo para la salud. El buen ejemplo de padres y familiares es fundamental en este sentido.
El ejemplo de los padres es la mejor forma de fomentar cualquier hábito en los hijos, así que es necesario que los niños los vivan en casa para poder integrarlos de forma natural, pero consciente, a lo largo de su vida. Para ello es importante no forzarlos, para que no lo perciban como una obligación. Es mejor integrarlos de forma natural, e incluso divertida, para que resulten experiencias positivas en familia que quieran mantener durante toda la vida.
Ayude a sus hijos a formar hábitos saludables ahora. ¡Los niños activos y saludables tienen más probabilidades de ser adultos activos y saludables!